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Hace ochenta y dos años esta noche, las fuerzas paramilitares (nazis) y civiles de las SA en toda la Alemania nazi llevaron a cabo un pogromo contra los judíos. Este evento se llama “Kristallnacht”, la noche de los cristales rotos. El nombre Kristallnacht proviene de los fragmentos de vidrio roto que cubrieron las calles después de que se rompieron las ventanas de las tiendas, edificios y sinagogas de propiedad judía. Las casas, los hospitales y las escuelas de los judíos fueron saqueados mientras los atacantes demolían edificios con mazos. Los participantes en los disturbios destruyeron 267 sinagogas en Alemania, Austria y Sudentenland. Más de 7,000 negocios judíos resultaron dañados o destruidos y 30,000 hombres judíos fueron arrestados y encarcelados en campos de concentración.
Antes de que se llevara a cabo este pogromo, el antisemitismo consistía en propaganda que afirmaba que el pueblo judío era responsable de la derrota alemana en la Primera Guerra Mundial, así como desastres económicos como la hiperinflación de Alemania y el colapso de Wall Street que inició la Gran Depresión.
La siguiente fase de persecución incluyó leyes antijudías que restringieron las oportunidades de empleo, limitaron los derechos de ciudadanía y la educación. Durante este tiempo, se cerraron los medios de comunicación judíos.
Un joven judío de 17 años disparó y mató a un diplomático y los nazis optaron por usar esto para tolerar los disturbios. Se le dijo a la policía que no interviniera, por lo que se alentó la violencia contra la población judía que era más pequeña. Un testigo (un reportero de noticias) escribió: “Vi mujeres vestidas a la moda aplaudiendo y gritando de júbilo, mientras que madres respetables de clase media sostenían a sus bebés para ver la “diversión”.
El 9 de noviembre de 1938, Kristallnacht, cambió la naturaleza de la persecución nazi de los judíos de la económica, política y social a la física con palizas, encarcelamiento y asesinato; A menudo se hace referencia al evento como el comienzo del Holocausto. Desde este punto de vista, se describe no solo como un pogromo, sino también como una etapa crítica dentro de un proceso en el que cada paso se convierte en la semilla del siguiente.
Al leer sobre Kristallnacht, es posible que le recuerde algunos eventos que han tenido lugar este año. Debemos recordar que la persecución se acerca y ahora ya está aquí. Puede comenzar pequeña y podemos pensar: “Bueno, eso no es bueno, pero no empeorará”. Pero, cuando leemos la profecía, sabemos que así será. Necesitamos estar en oración para permanecer fieles, pase lo que pase.
