Estudio Bíblico, Apocalipsis No. 29

Pasamos a Apocalipsis 9:1-12

Di-s es un Di-s de amor, pero también de santidad. Porque ama la santidad, manifestará juicio en este mundo para llevar a la gente al punto de cambio, al punto de arrepentimiento. ¿Hasta dónde tiene que llegar Di-s para lograr un cambio en nuestras vidas?

v1: Una estrella… Se le dio…: Este es un ser celestial único. No es un objeto inanimado, sino como otro ángel; posiblemente no sea un ángel de Di-s [estrella (caída) – véase Isaías 14:12-15].

• Caído… a la tierra… al abismo: Vemos otra transición aquí. Hasta este punto, han sucedido cosas en los cielos y luego han tenido un efecto en esta tierra. Esta estrella también desciende a la tierra (desde los cielos), pero luego se adentra más… desciende al abismo y luego el juicio surge del abismo (desde

infierno) para afectar la tierra.

v2: El sol y el aire se oscurecieron: A partir de la cuarta trompeta, la oscuridad comienza a descender sobre este mundo. La luz brilla con más fuerza en la oscuridad. Di-s traerá los efectos de la oscuridad, desde el abismo del infierno, a este mundo, creando un marcado contraste entre el mundo de la oscuridad y Di-s, que es luz (Juan 8:12).

v3: Del humo surgieron langostas sobre la tierra: Lo que está sucediendo aquí no es un suceso natural. Es sobrenatural. Nadie podrá confundir que lo que está sucediendo proviene de Di-s. La gente ampliará su perspectiva para incluir pensamientos sobre Di-s. Algunos incluso cambiarán su perspectiva y se arrepentirán en ese momento.

• Langostas: Estas langostas serán muy diferentes a las que imaginamos. Provienen del abismo del infierno y aman la destrucción y el dolor.
• Poder: Autoridad.
• Escorpiones: La picadura de un escorpión es extremadamente dolorosa. Di-s no solo le muestra al pueblo lo que será vivir en la oscuridad, sino que también les muestra (antes de que sea demasiado tarde para arrepentirse) lo que será vivir con un dolor extremo. Si el pueblo no se arrepiente, la oscuridad y el dolor serán su condición eterna.

v4: Se les ordenó no dañar la hierba: Ha transcurrido tiempo entre la primera trompeta(cuando se quemó toda la hierba verde – Apocalipsis 8:7) y esta quinta trompeta. La hierba y la vegetación han tenido tiempo de volver a crecer. Normalmente, las langostas se comen la hierba y toda la vegetación a la vista. Sin embargo, estas langostas no son en absoluto “normales”.

• Daño… solo a quienes… no tienen el sello de Di-s: Estas langostas no se comportan como se espera naturalmente de ellas. Se les ordena atacar a un grupo específico (muy grande) de seres humanos. La razón: intentar que las naciones se arrepientan.
• El sello de Di-s en sus frentes: En este versículo, Di-s afirma la singularidad del remanente de los hijos de Israel: aquellos que fueron sellados (y preservados) para atravesar este tiempo (véase Apocalipsis 7:1-8). Di-s distingue entre este remanente de Israel y las naciones (Éxodo 8:22-23, Éxodo 9:4, etc.).

v5: No se nos dio autoridad para matar… sino para atormentar: Los caminos y pensamientos de Di-s no son nuestros caminos ni pensamientos (Isaías 55:8-9). Cualquier capacidad que tengamos para conocer o entender a Di-s solo puede ser a través de la revelación/la iluminación de Su Palabra. Dejados a nosotros mismos, siempre malinterpretaremos la verdad, los caminos o los propósitos de Di-s. Lo que estamos viendo aquí es la misericordia y la bondad de Di-s hacia la humanidad. Di-s no quiere que una sola persona perezca (eternamente), y por eso, en Su gracia, Él está permitiendo que las personas experimenten tormento (como resultado de su rechazo a la gracia, el amor y la misericordia de Di-s) mientras aún tienen la capacidad de arrepentirse y alejarse de sus malos caminos. Di-s hace todo lo posible para llevar a las personas al arrepentimiento. Esta no es la ira total de Di-s, es una imagen de su juicio parcial.

• Cinco meses: «Cinco» es el número bíblico que representa la compleción. Estas personas sufrirán un gran dolor, pero es incompleto; no llega a su plenitud. Hay algo mucho peor que el dolor físico/terrenal. El dolor y el tormento eternos son MUCHO peores (Mateo 10:28).

v6: Buscar: En el lenguaje bíblico, esta es una palabra de gran intensidad. Con todo su corazón anhelarán o rogarán por la muerte. No buscan un Salvador. No buscan primero el Reino de Di-s y su justicia (Mateo 6:33). Su único deseo y anhelo, lo que anhelan con fervor, es la muerte. Sus corazones están puestos en la muerte. No comprenden que la muerte no es una escapatoria. La muerte los conduce a una eternidad de oscuridad y dolor (Mateo 25:30, 46).

v7-10: Estas langostas son muy singulares en apariencia y comportamiento (la imagen asociada a ellas es la de la guerra). Nunca han existido en el pasado. Ningún científico podrá explicar lo que sucede aquí. La única explicación posible en este punto será que se trata de una acción de Di-s (inicialmente, las plagas podían explicarse y copiarse; véanse Éxodo 7:11, 22; Éxodo 8:7. Sin embargo, a partir de la tercera plaga, no hubo duda de que Di-s las estaba provocando; Éxodo 8:18-19).

v11: Estas langostas son alienígenas provenientes del abismo del infierno. Su propósito es dar a la gente una muestra (un anticipo/presagio) de cómo sería el juicio/la condenación eterna de Di-s. ¿Cómo responderá la gente? ¿Se arrepentirán, como lo hicieron algunos egipcios (Éxodo 9:19-21)? ¿O endurecerán aún más su corazón? Las señales y prodigios/ver la mano sobrenatural de Di-s en ciertas situaciones hicieron poco para cambiar los corazones o las mentes del pueblo egipcio. No podemos considerar las señales como prodigios como un catalizador para el cambio en los corazones de las personas. Solo la fe en la Palabra de Di-s y la revelación de Él pueden producir un cambio. Los egipcios en Éxodo 9:20 depositaron su fe en la Palabra de Di-s, y gracias a ella ellos, sus siervos y su ganado se salvaron.

• Tenían como rey al ángel del abismo (infierno): Este ángel que gobierna el infierno no es un ángel típico. Posiblemente sea un ángel caído, ya que Abadón o Apolión significan «Destructor». Este ángel representa el caos y la destrucción (ninguno de los cuales es divino).

v12: En Apocalipsis 8:13, el ángel pronunció «¡Ay, ay, ay!»: tres ayes. Esta quinta trompeta solo anunció el primer ay. Aún quedan dos ayes por cumplir. El primer «ay» es realmente terrible, pero los ayes que le siguen son aún peores.

• He aquí: Una palabra que nos recuerda que debemos prestar atención, ya que lo que sigue es una verdad extremadamente importante.
• Dos ayes más se avecinan: el castigo de Di-s se intensifica cada vez más. Di-s intenta mostrar al pueblo impenitente cómo será la muerte eterna sin un Salvador. La verdadera vida eterna solo nos es dada en Yeshúa, cuando tenemos una relación con el Di-s Viviente. La muerte eterna significa que estamos separados eternamente de Di-s, la Luz del mundo, el Príncipe de Paz.