
Leeremos juntos Apocalipsis 3:11-13
v11: Vengo pronto: Esto se refiere al rapto. Necesitamos vivir con la expectativa del cumplimiento de las promesas de Di-s (Romanos 8:18-25, Santiago 5:7-8, Tito 2:13, Filipenses 3:20-21).
- Mantened firmes: Fortaleced. Afirmad vuestros corazones.
- Nadie puede quitarnos la corona: Nadie puede quitarnos la salvación, pero sí podemos ser engañados (desviados) y perder nuestra recompensa (nuestra corona). Este versículo nos advierte que no nos dejemos engañar (2 Tesalonicenses 2:3, Efesios 5:6, Mateo 24:4). Si vivimos vidas que están en conflicto con la verdad, o vidas que no son dignas de alabanza, sufriremos pérdida (1 Corintios 3:12-15).
v12: Un pilar: Los pilares se asientan firmemente sobre cimientos sólidos. Los pilares dan soporte y fuerza a un edificio. ¿Queremos participar en la edificación de la casa de Di-s (su cuerpo), para que pueda adorarlo con mayor eficacia?
- No saldrá más: Esto habla de una intimidad continua con Di-s.
- Escribiré sobre él: Aquí se prometen tres nombres (el ‘nombre’ habla de carácter/naturaleza/reputación) …
- Heredamos el nombre de Di-s Padre (Efesios 1:5-6; Romanos 8:14-17; Gálatas 4:5-7; Juan 1:12-13). El carácter del Padre se convertirá en nuestro carácter (Juan 8:29).
- Heredamos el nombre de la ciudad de nuestro Di-s, la Nueva Jerusalén (esta es la primera vez en la Biblia que Jerusalén se nos presenta con este nombre. Se alude a ella en el Antiguo Testamento, pero esta es la primera vez que oímos hablar de su nuevo nombre/nueva naturaleza). La Nueva Jerusalén es Jerusalén en su estado final: su estado completo y perfecto. Al igual que Jerusalén, a nosotros también se nos promete una renovación final y completa (Filipenses 1:6; 1 Corintios 15:50-52; Apocalipsis 21:5). Al igual que Jerusalén, si vencemos, también recibiremos un nuevo nombre (Isaías 62:2; Apocalipsis 2:17).
- Heredamos el nombre de Yeshúa Esto significa que si hemos sido fieles y hemos permitido que el amor de Di-s nos transforme, vamos a entender la verdadera identidad de Yeshúa.
v13: Que oiga: Oímos para poder responder.


