
Ahora pasamos al Capítulo 5.
v1: ¡Qué versículo tan impactante para abrir este pasaje! Fuimos creados a imagen de Di-s: para reflejar Su Gloria (2 Corintios 3:18), pensar como Él (1 Corintios 2:16), tener Su misma actitud (Filipenses 2:5-8), hablar como Él (1 Pedro 4:11), actuar como Él (Mateo 5:43-48).
v2 Di-s nos puso un nombre. Bíblicamente, un nombre es sinónimo de carácter.
- Nuestros padres nos dan un nombre (como estos “niños” mencionados en este capítulo) y ese nombre nos marca para el resto de nuestras vidas. Pero Di-s también tiene un nombre que nos llama y que finalmente quiere revelarnos (Apocalipsis 2:17) y quiere que tomemos su nombre (Apocalipsis 3:12).
- Por favor, lea 1 Pedro 1:3-4, en https://biblehub.com o https://blueletterbible.org, en la versión King James (Reina-Valera en español) de la Biblia. Dice que Di-s nos ha engendrado. Él nos ha dado a luz.
Nota 1: En el Tanaj (Biblia hebrea) la forma en que introducen los nombres de los niños es así, por ejemplo:
Adán engendró (dio a luz) a Set.
Todos sabemos que la madre dio a luz al niño, pero al padre se le atribuye su nacimiento.
Simplemente tiene mucho sentido a la luz del hecho de que Di-s nos engendró como se menciona en 1 Pedro. Nota: Este hecho se “pierde en la traducción” cuando se lee de la NVI (Nueva Versión Internacional).
¡Nota! El Padre tiene derecho a nombrarnos, y con orgullo llevamos su apellido.
Nota 2: Las genealogías bíblicas son de gran importancia y pueden enseñarnos mucho, por ejemplo, si trazas todos estos nombres en un gráfico de tiempo, podrías descubrir algunos datos interesantes… como quién estaba vivo para hablar con Adán y también quién murió en el año del diluvio.