Estudio Bíblico, Apocalipsis No. 6

Comenzamos esta semana analizando Apocalipsis 2:1-4.

La iglesia está formada por un cuerpo de creyentes (aquellos que han creído en Yeshúa como su Señ-r y Salvador) que han sido llamados a salir del pecado y de la mentalidad de este mundo, para cumplir los propósitos de Di-s. Son personas que dan testimonio de la Palabra de Di-s, no solo con palabras, sino principalmente a través de sus vidas, su comportamiento. Las vidas de los creyentes deben ser tales que sean testigos vivos del mundo moribundo que los rodea, reflejando y manifestando la Presencia de Di-s, Su Gloria, a los que están en el mundo.

Algunos comentaristas han especulado que las siete congregaciones, mencionadas en Apocalipsis 2 y 3, se relacionan con siete dispensaciones diferentes a lo largo de la historia de la iglesia (es decir, distribuidas a lo largo de los últimos 2000 años). Aunque esta es una interpretación popular, no encontramos ninguna evidencia bíblica, ni de otro tipo, que respalde esta teoría. Para el propósito de este estudio, no vamos a ver a estas iglesias desde la perspectiva de estar distribuidas en siete períodos de tiempo diferentes. Di-s dio estas siete cartas a siete congregaciones con el propósito de santificarlas o apartarlas. Sin importar en qué generación (o dispensación de tiempo) estemos, podemos aprender de cada una de estas cartas todo lo que necesitamos escuchar, específico para nuestra generación. Estas cartas son la revelación perfecta de Di-s al cuerpo de creyentes a lo largo de la historia, sin importar en qué período de tiempo vivamos.

v1: Ángel: En este contexto, esta palabra probablemente no se refiere a un ser sobrenatural o celestial. También se puede traducir como «mensajero» y probablemente se entienda mejor como dirigida al líder de esa congregación.

• Éfeso: En aquella época, Éfeso era conocida como un centro educativo. Contaba con una enorme biblioteca y se consideraba un lugar de gran aprendizaje (el Oxford/Cambridge de la época).
• El que sostiene … (El) que camina: El libro de Apocalipsis trata más sobre QUIÉN (la revelación de Jesús) que sobre QUÉ. En cada carta, se nombra a la congregación y luego se presenta inmediatamente a Yeshúa. Es importante destacar que cada iglesia recibe su propia descripción única y diferente del carácter de Yeshúa. Yeshúa dio a cada una de estas congregaciones la perspectiva a través de la cual quería que lo vieran.
• Siete estrellas: No tenemos que adivinar a quién o qué representan estas estrellas. Apocalipsis 1:20 nos dice que representan a los líderes de las congregaciones. Yeshúa sostiene a estos líderes en su mano. Han sido llamados/comisionados por Él para dar un mensaje a las iglesias que dirigen, y reciben el apoyo de Di-s.
• En medio de los siete candeleros de oro: Apocalipsis 1:20 también nos dice que estos candeleros representan las iglesias, el cuerpo de creyentes. Este versículo enfatiza la presencia de Di-s (mediante su Espíritu Santo) con quienes creen en él. La presencia de Di-s, entre nosotros, nos sostiene y nos ayuda a ser fieles a sus propósitos.

v2: Conozco tus obras: Lo que hacemos, y no solo lo que creemos, es importante para Di-s. Di-s no está evaluando a estas iglesias con respecto a la salvación; ya son parte del cuerpo de creyentes y ya son salvas. Lo que se evalúa es su fecundidad: lo que han hecho con lo que han recibido (el mensaje del evangelio). Los creyentes no van a ser juzgados en cuanto a si van al cielo o al infierno. Cuando creemos en Yeshúa y lo aceptamos como nuestro Señ-r y Salvador, se nos garantiza la vida eterna (no la muerte eterna/infierno). Sin embargo, los creyentes van a pasar por un juicio de obras (1 Corintios 3:9-15, Apocalipsis 20:12-13). Nuestras obras NO determinan nuestro destino eterno, pero SÍ determinan nuestras recompensas eternas. Algunas personas recibirán muchas recompensas eternas. Otras recibirán la vida eterna, pero no recibirán una sola recompensa (1 Corintios 3:14-15).

• Paciencia: Perseverancia.
• No pueden soportar a los malvados: Esta congregación no hizo la vista gorda ante la maldad dentro de su congregación. La confrontaron y la abordaron radicalmente. «Los malvados» no se refiere a las personas del mundo. Se refiere a quienes dicen ser creyentes («hermanos»), pero sus vidas sugieren lo contrario. A estos no debemos tolerar (1 Corintios 5:11-13).
• Probaron a quienes se dicen apóstoles y no lo son: Esta congregación fue lo suficientemente sabia como para ejercer discernimiento espiritual (1 Corintios 2:13-16). Pudieron comparar a las personas y sus comportamientos con la Palabra de Di-s y, a su vez, distinguir entre lo correcto y lo incorrecto, lo bueno y lo malo, lo que es de Di-s o lo que lo contradice (1 Juan 4:1-6).
• Los encontré mentirosos: Vivimos en tiempos de gran engaño y noticias falsas. Ahora, más que nunca, la gente necesita saber qué es verdad y qué es mentira. En los últimos días, la Biblia profetiza que un gran engaño vendrá sobre el mundo y muchos serán extraviados (2 Tesalonicenses 2:9-12). El único antídoto contra este engaño será conocer la Verdad. Esta Verdad solo se puede encontrar en la Palabra de Di-s (Juan 14:6, Apocalipsis 19:13).

v3: Habéis perseverado…habéis tenido paciencia…habéis trabajado arduamente…no os habéis cansado: Di-s aplaudió a esta congregación por todas las cosas buenas que estaban haciendo.

v4: Sin embargo: Pero … Di-s, primero, elogió a esta congregación por lo que hacían bien, y luego los aconsejó, castigó, disciplinó respecto a sus carencias. Les mostró sus fortalezas y luego les reveló sus debilidades.

• Has dejado tu primer amor: Éfeso era un lugar de gran aprendizaje. El conocimiento había dado a esta congregación discernimiento y sabiduría. Conocían la verdad, pero esta no los conducía a la intimidad con Di-s. Tenían conocimiento teórico e intelectual, pero carecían del conocimiento del corazón, es decir, del amor. Hicieron lo que hicieron porque sabían que era lo correcto. No estaban motivados a actuar por amor ni por reconocimiento a Di-s (con el deseo de agradarle).