El parashá de esta semana es Parashat Vayeishev. Esta porción cubre Génesis 37:1-40:23. Aquí hay un breve comentario de Baruch.
Hay muchos indicios en la Biblia hebrea que apuntan a la obra del Mesías de una manera inconfundible. En la porción de la Torá de esta semana, nos encontramos con un indicio de cómo el Rey Mesías fue profetizado para ser nuestro sacrificio por el pecado. A pesar de que el Mesías vendrá de la tribu de Judá, está claro que la vida de José personificó a Yeshua de muchas maneras diferentes. Yeshua no solo fue rechazado por Su pueblo, como José fue rechazado por sus hermanos, hay otra pista interesante con respecto al Mesías en el parashá de esta semana.
Después de que sus hermanos pusieron a José en un foso y luego lo sacaron de allí, lo que significa la resurrección, uno lee sobre algo interesante que hicieron con el abrigo de José. Este abrigo es enfatizado en este pasaje de las Escrituras. Se llama literalmente un abrigo con rayas. Esta es la misma terminología que se encuentra en el libro de 2 Samuel con respecto a Tamar. Allí, esta prenda se llama prenda real. Por lo tanto, es muy significativo que Jacob le dio precisamente a José una prenda real. Recuerda que la palabra Mesías se relaciona con el Rey. Además, se le dice al lector que los hermanos hicieron algo con esta prenda real.
“Y tomaron la túnica de José y mataron una cabra (como las que se usaron en la Pascua y Yom Kippur, el Día de la Expiación) y sumergieron la túnica en la sangre”. Génesis 37:31
Algunos eruditos entienden que este sacrificio se relaciona con la ofrenda por el pecado de los hermanos contra José. Además, hay que entender que, en última instancia, los hermanos se estaban rebelando contra la voluntad de Di-s. Los sueños de José que tanto enojaron a sus hermanos realmente les estaban revelando cómo HaShem iba a usar a José.
Es importante para uno recordar dos cosas. Una es que las prendas en las Escrituras se relacionan con las obras de uno y la segunda es que José personificó a Yeshua. En otras palabras, este versículo informa al lector que el Rey Mesías sería el sacrificio que expiaría el pecado como lo hizo el sacrificio de Yom Kippur y que provocaría la redención, como se realizó con el sacrificio de la Pascua.
Una gran cantidad de verdad en un pequeño verso. Esto debería motivarnos a estudiar en oración cada versículo de las Escrituras.